Este es un tema muy discutible, pero algunos “hechos” deben ser considerados.
Primero, como Grant Petersen (de Rivendell Cycles) señaló en su texto, para las carreteras duras y pavimentadas el mejor patrón de la banda de rodamiento es cero, porque el caucho del neumático se deforma alrededor de la textura del asfalto o del hormigón, y así el hilo cero ofrece una mayor área total de superficie de pavimento de caucho para entrelazar.
El extremo opuesto, los neumáticos de MTB super-knobby, están pensados para su uso fuera de la carretera, donde la superficie se deforma, teniendo un comportamiento mecánico visco-plástico. En lugar de que sólo la goma del neumático se ajuste a la textura de la carretera, en realidad el terreno blando se indentifica y “fluye” alrededor de los pomos del neumático, que son necesarios para transmitir las fuerzas de reacción al suelo sin resbalar, mientras se tracciona, se frena y se toman las curvas.
En el medio, tenemos todos los otros tipos de pavimento (arena, grava, paquete duro) y patrones de hilos (acanalados, semi-deslizantes, etc.)
En mi experiencia, el patrón direccional sólo se encuentra en los neumáticos de bicicleta de montaña destinados a ser utilizados fuera de la carretera o en tipos específicos de terrenos de senderos. Hay neumáticos con un patrón direccional único que debe ser invertido entre la parte delantera y la trasera. Hay neumáticos cuyo par delantero-trasero son contrapartes dedicadas. Mis favoritos fueron el IRC Mythos Kevlar 1.95 y el Pararacer Smoke/Dart 2.2 (¡cuidado niños, este último es MUY ANTIGUO!)
También descubrí que a veces no importa tanto si pones un neumático trasero delante (Specialized Cannibal, un típico neumático trasero, era genial en el delantero), o cometes otras herejías. Al final, el patrón general de la rosca, el tamaño y el espaciado de la perilla, el ancho total del neumático, y lo MÁS IMPORTANTE, las características de la goma, cuentan más que la orientación de la rosca.
Pero eso no es lo que la línea de neumáticos de “análisis vectorial” de Ritchey trataría de decirte. Por cierto, ¡esos neumáticos eran REY! (mayormente por su estructura y goma, diría yo).
Bueno, esto es mucha charla, pero la conclusión sería:
- En la parte delantera, siempre hay que estar atento a la dirección del neumático;
- En la parte trasera, puedes elegir, dependiendo de si tienes más tracción (cuesta arriba) o si frenas más (cuesta abajo);
- No creas demasiado en la magia.