Puedes usar una botella de spray con desengrasante diluido para rociar la cadena y limpiarla con una toalla vieja para quitar la mayor parte de la suciedad; o si está muy arenosa o embarrada puedes usar jabón normal y agua y una esponja. Luego limpia y lubrica la cadena como lo harías normalmente.
Después de usar varios limpiadores mecánicos de plástico para cadenas mi método favorito es también uno de los más baratos. Utilizo una lata pequeña, como una sopa o una lata de salsa de tomate, le pongo un poco de desengrasante y limpio la cadena con un cepillo de dientes viejo.
Está bien usar la botella, pero no uses gasolina, queroseno, disolvente de pintura u otros líquidos fuertes. Estos penetrarán profundamente en los eslabones y desplazarán el lubricante que intente volver a aplicar, además de crear un importante riesgo de incendio. A algunas personas les gusta usar combustible diesel, lo cual está bien. En mi opinión, me quedaría con un producto desengrasante de calidad.